La fotografía de comunión debe ser natural, fresca y sobre todo salirse de tópicos. Todo evoluciona con el paso de los años y es por eso que también es mi obligación cambiar este tipo de reportajes.
Aunque no es habitual tampoco estar delante de un toro de 500 kilos mientras realizas fotos a una pequeña princesa vestida de blanco, pero yo siempre estoy abierto a todo lo que me propongan (aunque un poquito acojonado, porque no decirlo jajaja).
Un abrazo familia, mil gracias por esta fantástica experiencia.
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