Siempre digo que mi trabajo de boda se basa en transmitir a través de cientos de fotos, todos y cada uno de los momentos allí vividos para no solo recordarlos de una manera fiel sino también, para que al ver la foto os venga a la memoria lo que en ese momento sucedió, el porqué de las cosas y las situaciones que allí tuvieron lugar.
Sonrisas, abrazos, caras de asombro, situaciones cómicas, momentos graciosos todo tiene un lugar en mis reportajes de boda y son ellos los que le dan forma al conjunto de fotos que narran desde el comienzo uno de los días más importantes para vosotros.
Solo me hace falta mostrar menos de un 10% de las fotografías entregadas, para que os hagáis una idea de la enorme narrativa visual que engloba todo mi trabajo. Y todo ello entregado a las pocas semanas de la boda.
Así pues, os dejo con Marisa y César una pareja con la que ha habido una confianza muy especial y con la que he pasado horas de barra de bar charlando sobre todo tipo de temas.
¡Un fuerte abrazo pareja!
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